Son muchos los cuestionamientos que como empresa surgen al vivir un accidente como el acontecido, en el que no sólo se mueven temas operativos, sino; emociones, dolor, angustia al perder uno de nuestros compañeros; uno muy especial, que nos permitió entrar en su corazón y que entregó todo porque nuestro sueño de volar permaneciera.
Hoy en honor a él a su entrega, en respuesta a todas las familias que hacen parte de nuestra compañía, no es tiempo para hacernos a un lado, tampoco para bajar la cabeza; es tiempo para revisar qué pudo pasar, en qué debemos mejorar, no solo en temas de compañía; sino, como seres humanos.
Estos momentos permiten entrar mucho más a fondo de la organización y reconocer grandes fortalezas que tenemos, como nuestro equipo humano, quienes han demostrado su profesionalismo y amor a pesar de la tristeza; su fuerza interna, su respaldo, su compromiso por este proyecto, por ellos y sus familias tenemos la responsabilidad de avanzar.
Así mismo, tener la tranquilidad de contar con una plataforma estratégica, procesos sólidos, procedimientos estandarizados y la respectiva documentación de acuerdo a las normativas, objetivos y funciones que cumplen dentro de la compañía; lo que permite responder adecuadamente a los públicos que intervienen en investigaciones, que de seguro van a ayudarnos a mejorar cada día más en compañía de las autoridades correspondientes.
Sentir el respaldo de colegas que nos brindan la mano, que están a disposición y nos abren las puertas en un momento de gran turbulencia.
El apoyo de entidades que comprende una emergencia como ésta, que facilitan los procesos y permiten nuestra respuesta en el menor tiempo posible.
Nuestros clientes, sus palabras de aliento y confianza, nos confirman que nuestro trabajo no ha sido en vano, que los lazos construidos con cada uno de ellos, son gracias a la prestación de un servicio con calidad y con un alto nivel de competencia.
Gracias a todos los que se han hecho presentes, los que respaldan un proyecto que se ha construido con transparencia, con exigencia y siempre encaminados a la calidad.
Cada tropiezo, pero en especial uno tan doloroso que nos arrebata el compartir con un ser tan especial como Iván, nos confronta como personas, como profesionales, como familia y como empresa.
Gratitud por lo aprendido y por lo que seguiremos aprendiendo.
Jhon Jairo Villada Londoño
Gerente General de Helifly